Estaba en Iraca grande (chota) pues mi hermana me había llevado allá para conocer por primera vez a mi abuelita por parte de mi papa.
Llegamos al pueblo mi hermana, mi cuñado, unas primas y yo en donde cogimos una moto que nos llevo hasta Iraca grande, bajamos de la moto y luego tuvimos que caminar 2 horas, hasta que por fin llegamos, después de caminar tanto estaba agotada era la primera vez que estaba en la sierra y me hacían ¡caminar¡ ya no aguantaba más.
Llegue salude a mi abuelita y a unas tías que no conocía ,nos comunicaron que justo ese día iba a ver un rezo para mi abuelito que ya es fallecido; eran las 7:00 de la noche y mis familiares iban llegando, hasta que más arriba de la casa de mi abuela se escucharon unos gritos que decían ¡no nos maten ¡auxilio¡ justamente de la casa de unas primas yo me asuste horrible y más aun cuando mis primos agarraron un machete y se fueron y lo peor mi cuñado fue tras ellos con una linterna para que supuestamente los alumbre, yo ya me desmayaba pensaba que de repente los mataban y el miedo me embargaba
Luego mi hermana al ver que mi cuñado se fue con ellos, el miedo y la cólera hicieron que se vaya tras ellos, ahí sí que ya me moria, ahora no solo eran mis primos y mi cuñado seno también mi hermana, yo lloraba sin parar pues pensaba que algo malo les iba a pasar y justo hay una de mis tías me dice déjalos ya vendrán y si los matan ya pues los enterramos, por respeto no le respondí nada sino adonde la hubiera mandado.
Y en lo que estaba llorando levante la mirada y vi a mi hermana mi cuñado mis primos y a las que habían gritado, me sentí mejor pero todavía tenía miedo.
Llorando y con la presión baja le pregunte a mi cuñado que había pasado me dijo que unos señores habían querido hacer problema pero que la ronda se los había llevado, y tuvo que hacer de todo para que mi hermana lo perdone; y obvio lo perdono. Mis tíos y los demás se reían de mi porque dicen que mas lloraba por no iba a ver quién me regrese a Chiclayo y no porque algo les podía pasar, no me quedo mas que también reírme.
Y eso fue una del las experiencias más feas de mi vida, aunque al final algo chistosa.
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